Crónica del viaje: Día de asueto

La tarde comienza a caer y las vistas desde los 4.000m son impresionantes; por fin vemos la parte italiana de Cervinia, tan pelada de nieve como la suiza. Vislumbramos también grandes picos en ésta parte que imaginamos será de la parte de Aosta, y de la parte suiza, qué deciros, más no se puede pedir.
La cumbre la tenemos ahí al lado, no paramos de mirar hacia arriba y descubrir el recorrido, que como hemos leído, se trata de meterse en la arista y no salir de ella.

No es tiempo suficiente de subir y bajar, al menos preveemos unas seis horas entre subida y bajada a buen ritmo, y tampoco es plan de madrugar, dado que no conocemos la ruta e ir solo con el frontal no es suficiente.
La decisión está tomada, nos tranquilizaremos y sobre todo repondremos fuerzas a lo largo de todo el día y pensaremos en el siguiente.
Continuará ...
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