Aventura invernal en el cervino
Montaña ideal, soñada, imposible, con historia.
Escultural silueta allí donde las halla.
Con dos aristas/vías normales, Hornli por Suiza y Lion por Italia.
Si éstas no estuviesen equipadas, la dureza de la ascensión se multiplicaría
por 1000.
El desarrollo, la innovación, la facilidad en los accesos,…., todos éstos factores y muchos más, contribuyen a que ésta bella montaña, en verano, sea pasto de centenares de aficionados a la montaña. La lógica hace que esto sea evidente, buenas condiciones, buen tiempo, más fácil la ascensión, pero sobre todo la aglomeración.
Pocas montañas quedan en el panorama mundial, a las que no haya llegado la mano del hombre. Carreteras, pistas forestales, teleféricos, etc … ,nos ponen a pie de la montaña a golpe de bolsillo.
¿dónde está el espíritu de aventura inherente al verdadero montañismo? Poco a poco va desapareciendo y el intentar acceder a lugares “poco visitados o escalados” conlleva un esfuerzo extra que no todo el mundo puede permitirse.
Trabajo u ocio, quien pudiera decir eso de, tengo dos, tres y cuatro meses para hacer actividad, viajar, escalar, conocer lugares, etc…. cada vez hay menos tiempo para todo esto, y el poco que tenemos, hay que compartirlos con multitud de actos del día a día, familia, amigos, compromisos extras…
Muy difícil es separarnos de todo este berenjenal, y una decisión difícil de no compartir.
En siete, quince o treinta días, no se pueden hacer muchas cosas, con una logística complicada. Para ello volvemos al “golpe de talonario” claro está, que todo el mundo no puede hacerlo y solo unos elegidos están en ésta disposición. ¿elegidos? No sabría que decir de toda esta parafernalia, y esto es lo que está disipando ese espíritu del que antes mencionaba.
Por todo esto, elegimos ésta montaña, pero con un drástico NO, a la aventura estival.
Una decisión, quizás un poco alocada y con un alto porcentaje de probabilidad de no llegar a la cima, pero también con un alto porcentaje de probabilidades de divertirnos, disfrutar de las grandes cumbres y sobre todo con los amigos y con un altísimo porcentaje de probabilidades de soñar y seguir soñando.
Si en verano el tiempo es cambiante, en invierno mucho más, pero eso no es un impedimento para viajar, conocer y acercarnos a ver la majestuosa silueta del CERVINO.
Sabemos que nos vamos a colar en una aventura apta solo para “locos” pero quien no tiene una pizca de locura y quien no la tenga, seguro que disfruta de una vida bastante monótona y aburrida.
Escultural silueta allí donde las halla.
Con dos aristas/vías normales, Hornli por Suiza y Lion por Italia.
Si éstas no estuviesen equipadas, la dureza de la ascensión se multiplicaría
por 1000.
El desarrollo, la innovación, la facilidad en los accesos,…., todos éstos factores y muchos más, contribuyen a que ésta bella montaña, en verano, sea pasto de centenares de aficionados a la montaña. La lógica hace que esto sea evidente, buenas condiciones, buen tiempo, más fácil la ascensión, pero sobre todo la aglomeración.
Pocas montañas quedan en el panorama mundial, a las que no haya llegado la mano del hombre. Carreteras, pistas forestales, teleféricos, etc … ,nos ponen a pie de la montaña a golpe de bolsillo.
¿dónde está el espíritu de aventura inherente al verdadero montañismo? Poco a poco va desapareciendo y el intentar acceder a lugares “poco visitados o escalados” conlleva un esfuerzo extra que no todo el mundo puede permitirse.
Trabajo u ocio, quien pudiera decir eso de, tengo dos, tres y cuatro meses para hacer actividad, viajar, escalar, conocer lugares, etc…. cada vez hay menos tiempo para todo esto, y el poco que tenemos, hay que compartirlos con multitud de actos del día a día, familia, amigos, compromisos extras…
Muy difícil es separarnos de todo este berenjenal, y una decisión difícil de no compartir.
En siete, quince o treinta días, no se pueden hacer muchas cosas, con una logística complicada. Para ello volvemos al “golpe de talonario” claro está, que todo el mundo no puede hacerlo y solo unos elegidos están en ésta disposición. ¿elegidos? No sabría que decir de toda esta parafernalia, y esto es lo que está disipando ese espíritu del que antes mencionaba.
Por todo esto, elegimos ésta montaña, pero con un drástico NO, a la aventura estival.
Una decisión, quizás un poco alocada y con un alto porcentaje de probabilidad de no llegar a la cima, pero también con un alto porcentaje de probabilidades de divertirnos, disfrutar de las grandes cumbres y sobre todo con los amigos y con un altísimo porcentaje de probabilidades de soñar y seguir soñando.
Si en verano el tiempo es cambiante, en invierno mucho más, pero eso no es un impedimento para viajar, conocer y acercarnos a ver la majestuosa silueta del CERVINO.
Sabemos que nos vamos a colar en una aventura apta solo para “locos” pero quien no tiene una pizca de locura y quien no la tenga, seguro que disfruta de una vida bastante monótona y aburrida.
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